En 2022, el Parlamento Europeo, impulsado por el Grupo S&D, y el Consejo adoptaron una Directiva sobre salarios mínimos adecuados. Esta Directiva aumentará la protección del salario mínimo en beneficio de los trabajadores y trabajadoras, ya sea por ley o mediante convenios colectivos, y reforzará la negociación colectiva a nivel nacional para incrementar el número de trabajadores y trabajadoras protegidos por convenios colectivos. Se trata de un gran éxito para el Grupo S&D, ya que supone un giro de 180 grados en la política europea. Como reacción a la crisis financiera, la Comisión Europea llevaba años promoviendo recortes salariales, el desmantelamiento de la negociación colectiva y una competencia en los salarios. Ahora, la atención se centra en unos salarios dignos, en reforzar la negociación colectiva, reducir las desigualdades salariales y conseguir una convergencia social al alza. Los salarios mínimos dignos benefician en particular a las personas con bajos ingresos, muchas de las cuales son mujeres. Pedimos a los Estados miembros que garanticen que sus salarios mínimos respondan al aumento del coste de la vida y pongan fin a las variaciones y deducciones que los socavan.
En la última sesión plenaria del pasado mandato, el Parlamento Europeo confirmó una ley histórica destinada a proteger a más de 30 millones de trabajadores y trabajadoras de plataforma y el modelo social europeo. Fue la recta final de un difícil camino hacia esta nueva legislación, que emprendimos en 2016 en Praga, donde los y las Socialistas y Demócratas se comprometieron por primera vez a luchar por la protección de todos los trabajadores y trabajadoras en la era digital. Esta histórica legislación es resultado de la batalla que la familia progresista ha librado durante ocho años. Los y las Socialistas y Demócratas encabezaron las negociaciones en nombre del Parlamento Europeo, y nada de esto habría sido posible sin el trabajo del comisario de Empleo y Derechos Sociales, Nicolas Schmit, que presentó una propuesta legislativa de amplio alcance. Se ha tenido que librar una ardua batalla contra las agresivas prácticas de presión de los gigantes de las plataformas, pero finalmente ha vencido la Europa social. Esta ley consiste en proteger a las personas que nos trasladan de un sitio a otro, nos traen comida y nos prestan tantos otros servicios cada día, que trabajan para Uber, Deliveroo, Amazon, Helpling y plataformas similares. Muchas plataformas las contratan como falsos autónomos/as, privándoles de salarios dignos y derechos laborales. Ahora esto va a cambiar. La nueva legislación no solo protegerá a los trabajadores y trabajadoras de plataforma, sino que también preservará el verdadero trabajo autónomo, evitará la competencia desleal e introducirá normas revolucionarias sobre gestión algorítmica para que las máquinas no puedan despedir o espiar a las personas. Todo esto convertirá a Europa en pionera en Derecho laboral a escala mundial.
Tras años de llamamientos a la acción por parte del S&D, la Unión Europea introdujo una Directiva sobre transparencia retributiva en 2023 para defender el derecho a la igualdad de remuneración. Esta histórica Directiva establece normas de transparencia salarial para ayudar a los trabajadores y trabajadoras a hacer valer su derecho a la igualdad de remuneración con vistas a atajar la brecha salarial de género y la brecha de género en las pensiones. En 2021, las mujeres seguían ganando un 13 % menos de media por hora que los hombres y sus pensiones eran incluso un 30 % inferiores. Al mismo tiempo, la tasa de empleo de las mujeres era un 11 % inferior a la de los hombres (del 69 % frente al 80 %).
Tras años de presión política por parte del Grupo S&D, en 2021 se estableció la Garantía Infantil Europea, acompañada de la obligación de que los Estados miembros con una tasa de riesgo de pobreza superior a la media de la UE invirtieran al menos el 5 % de sus recursos del Fondo Social Europeo Plus (FSE+) en la Garantía Infantil. Queremos garantizar que todos los niños y niñas europeos en riesgo de pobreza tengan acceso a una atención sanitaria gratuita y de calidad, una educación gratuita y de calidad, una atención a la infancia gratuita y de calidad, una vivienda digna y una alimentación adecuada. La Garantía Infantil es una importante inversión en el futuro, en la estabilidad y en la prosperidad de la Unión Europea, pero necesita recibir una financiación suficiente. Por ello, el Grupo S&D ha convencido a una mayoría en el Parlamento Europeo para pedir que se asigne un presupuesto específico de al menos 20.000 millones de euros a la Garantía Infantil.
Faltan oportunidades de empleo a tiempo completo para los y las jóvenes y muchos de ellos se ven obligados a aceptar puestos precarios, como períodos de prácticas explotadores, falsos períodos de prácticas y períodos de aprendizaje profesional no remunerados. El Grupo S&D ha liderado una exitosa campaña en el Parlamento Europeo a favor de una Directiva sobre períodos de prácticas de calidad que establezca criterios mínimos de calidad, como una remuneración justa, condiciones laborales dignas, acceso a la protección social, una duración limitada de las prácticas y el reconocimiento de las prácticas como experiencia laboral en los procesos de contratación. Se espera que la Comisión Europea por fin presente una propuesta de Directiva sobre períodos de prácticas de calidad en 2024.
En vista de los más de 3.300 accidentes laborales mortales y los más de 3 millones de accidentes laborales no mortales que se produjeron en 2018, así como de los más de 200.000 de trabajadores y trabajadoras que mueren cada año a causa de enfermedades profesionales, el Grupo S&D ha venido presionando por unas normas más rigurosas en materia de salud y seguridad en el trabajo. El enfoque de “Visión Cero” con respecto a los accidentes y las enfermedades relacionados con el trabajo solo podrá materializarse si los intereses financieros de las empresas no se anteponen a la salud de los trabajadores y trabajadoras. El Grupo S&D emprendió con éxito una ambiciosa revisión de la Directiva sobre el amianto en el trabajo, que contempla una inspección obligatoria de los edificios y la posterior eliminación del amianto y otras sustancias peligrosas antes de realizar obras de renovación. Asimismo, la Directiva sobre agentes carcinógenos y mutágenos, destinada a proteger a los trabajadores y trabajadoras frente al cáncer, se ha revisado de forma fructífera en dos ocasiones desde 2019, lo que ha incluido una ampliación a las sustancias perjudiciales para la reproducción. Por último, el Grupo S&D ha encabezado la lucha por una Directiva sobre el derecho a la desconexión y unas normas sobre requisitos mínimos para el teletrabajo. Puesto que las organizaciones patronales se negaron a adherirse a un acuerdo con los interlocutores sociales, esperamos que la Comisión Europea presente un proyecto de ley en 2024.
La mejora y el refuerzo de los comités de empresa europeos ha sido una prioridad del Grupo S&D y de los sindicatos desde 2009. Hubo que esperar hasta 2022 para que una mayoría en el Parlamento Europeo pidiera una revisión de la Directiva sobre la constitución de un comité de empresa europeo. Queremos garantizar que los empleadores no puedan bloquear la creación de un comité de empresa europeo en una empresa multinacional, a través del cual se informe y consulte a los representantes de los trabajadores con suficiente antelación, y que la dirección no realice un uso abusivo de las cláusulas de confidencialidad para debilitar dichos comités. La Comisión Europea presentó una propuesta de revisión de la Directiva a principios de 2024.
Queremos una estrategia integral de lucha contra la pobreza con objetivos vinculantes para reducir la pobreza y poner fin al sinhogarismo, una revisión de las normas sobre ayudas estatales de la UE con el fin de garantizar la vivienda social y crear barrios socialmente mixtos, objetivos vinculantes para garantizar una vivienda asequible (al menos un 30 % de la nueva vivienda para los grupos de bajos ingresos y un 30 % para los grupos de ingresos medios), un presupuesto específico de al menos 20.000 millones de euros para la Garantía Infantil Europea y una duplicación del presupuesto del Fondo Social Europeo Plus (FSE+) para las personas más desfavorecidas, además de una Directiva sobre regímenes de renta mínima adecuada, que garantice la integración de las personas que se encuentran fuera del mercado de trabajo.
Pedimos que se refuerce el mandato de la Autoridad Laboral Europea (ALE) a fin de ofrecer una mejor protección a los trabajadores y trabajadoras móviles, incluidos los nacionales de terceros países, y que se introduzca una tarjeta europea de seguridad social, que sirva de instrumento de ejecución a escala de la Unión para coordinar la seguridad social y garantizar una movilidad laboral justa, así como financiación de la UE para establecer redes de asesoramiento y apoyo transnacional a los trabajadores y trabajadoras móviles.
Queremos una Directiva sobre inteligencia artificial en el lugar de trabajo que garantice el control humano de las decisiones relacionadas con el empleo y proteja los derechos fundamentales y sociales de los trabajadores y trabajadoras, una Directiva sobre períodos de prácticas de calidad que acabe con la explotación de la juventud y garantice que los trabajadores y trabajadoras en prácticas y los becarios y becarias reciban una remuneración justa, así como una Directiva sobre la información, la consulta y la participación de los trabajadores aplicable a todas las formas de sociedad, incluidas las cadenas de subcontratación y las franquicias, a fin de anticipar cambios relativos a la reestructuración, la transformación digital y el cambio climático.
Queremos que se revise la Directiva sobre la constitución de un comité de empresa europeo con el fin de mejorar la información y la consulta de los representantes de los trabajadores de las empresas multinacionales, evitar abusos de las cláusulas de confidencialidad por parte de la dirección y prever sanciones efectivas. También deseamos que se revise la Directiva sobre las agencias de trabajo temporal para acabar con los intermediarios del mercado laboral que no cumplen la normativa de la UE y garantizar la igualdad de trato de los trabajadores y trabajadoras, incluidos los trabajadores y trabajadoras de temporada y móviles.
También queremos que se limiten las cadenas de subcontratación y se establezcan normas claras de responsabilidad para la subcontratación.
En nuestro empeño por respaldar a los trabajadores y trabajadoras, abogamos por varias Directivas clave para mejorar el equilibrio entre la vida laboral y personal y proteger el bienestar. En primer lugar, proponemos una Directiva que se ocupe del derecho a la desconexión y establezca unas condiciones claras para el teletrabajo. Reconociendo la importancia de la salud mental, propugnamos una Directiva que aborde de forma específica los riesgos psicosociales y promueva el bienestar general en el lugar de trabajo. Asimismo, destacamos la importancia de una Directiva centrada en los trastornos musculoesqueléticos relacionados con el trabajo, con el objetivo de crear un entorno de trabajo más saludable y ergonómico. También abogamos por una Directiva destinada a garantizar el reconocimiento y la indemnización adecuada de las enfermedades profesionales, como la depresión, el desgaste profesional y el cáncer de piel.
Centramos nuestros esfuerzos en integrar el pilar europeo de derechos sociales y un protocolo de progreso social en los Tratados de la UE a fin de proteger los derechos sociales al mismo nivel que las libertades económicas en el mercado interior. Asimismo, pedimos un Pacto de Desarrollo Sostenible y Progreso Social que establezca el cumplimiento obligatorio de los objetivos sociales y sostenibles. Por lo que respecta al gasto público, defendemos la condicionalidad social, que significa que no podrá gastarse ni un solo euro del presupuesto de la UE en proyectos que no respeten los derechos sociales y laborales. En general, queremos proteger a las personas de las políticas de austeridad y prevenir los riesgos sociales derivados de las medidas políticas y las reformas económicas.
Abogamos por establecer un régimen europeo de reaseguro de desempleo para respaldar temporalmente los regímenes nacionales en tiempos de crisis y también deseamos que se mantenga el instrumento europeo de apoyo temporal para atenuar los riesgos de desempleo en una emergencia (SURE), de manera que contemos con un instrumento permanente para dar apoyo a los regímenes de reducción del tiempo de trabajo en tiempos de crisis.